H·Top Royal Sun

Hotel muy cómodo, cerca de la playa y con actividades varias como baile, gimnasia etcétera. Lo recomiendo ampliamente a decir verdad hay una buena relación calidad precio

Hotel de los años 70 del siglo pasado, un viaje en el tiempo, al pasado, no wifi, no adaptado para minusválidos, las instalaciones desgastadas por el uso del tiempo no se han renovado, las habitaciones con la llaves antiguas de latón, el acceso por la puerta principal supone que se tengan que superar unos escalones imposibles para personas con movilidad reducida antes de poder acceder a un pre recibidor con un ascensor hasta la recepción. Las habitaciones con los muebles originales de mas de 50 años y la loseria del suelo desconchada por el tiempo, el baño, con grifos individuales para el agua caliente y fría, y para la manguera de la ducha y el grifo de la bañera, los sobretechos, repintados en blanco sobre placas de amianto, racholas de las pareces algunas de ellas rotas, En fin, un lugar para la nostalgia con la decadencia que el tiempo ha imprimido en sus instalaciones y en su ambiente. Lo único positivo, el acceso directo a la playa.